Todos amamos a nuestros hijos .
queremos que sean felices.
Que logren lo que no pudimos lograr.
Que tengan lo que no pudimos tener.
Que sean lo que no pudimos ser.
Que viajen alrededor del mundo.
Estudien fuera del país.
¿Te has preguntado si es un cliché instaurado por
Nuestra generacion?
Cuando tu fuiste de su edad valorabas:
La libertad porque no la tenías.
Los viajes porque no los hacías.
El relajo porque tenías exigencia.
El decidir que comer por qué te lo imponían.
Haber interactuado más con la tecnología, la cual estaba en sus inicios.
Que lógraste con esto?
Quizás resentimiento,
Frustración, rebeldía.
Deseos de viajar.
De comprarte lo que quisieras.
De comer lo que desearás.
Pero ganaste: perseverancia, disciplina, constancia,
Creatividad porque siempre inventabas algo para entretenerte.
A cachuelearte para ir al cine o salir con tu enamorada.
Si tenías un auto aunque fuera viejito era un lujo.
Lograste ser profesional y constante en un trabajo.
Nuestros hijos no van a ser más felices porque:
Viajen
Tengan el mejor cumpleaños.
Decidan que comer, a qué hora dormir.
Querer que les compren todo lo que desean.
Sean los mejores deportistas.
Tengan el último video juego.
Estén en el mejor colegio.
Son ángeles que llegaron a nuestras vidas porque :
Nos retan para que seamos mejores personas.
Son nuestros maestros de la vida.
Gracias a ellos aprendemos a:
A amar
A llorar cuando sufren.
A regocijarnos con sus alegrias.
A aceptar a las personas como son.
A no discriminar.
Son una hoja en blanco que vamos llenando con nuestras
propias creencias, temores y valores.
Los responsables de su educación somos nosotros:
Tienen que equivocarse para aprender, tienen que sufrir para ser más fuertes, se les tiene que exigir para retarlos, corregirlos para que sean empaticos y no discriminen.
Ser ejemplo de amor, sacrificio y agradecimiento para que sigan nuestro camino.
Que respeten a los mayores, para que cuando seamos viejos valoren nuestra sabiduría y no solo vean nuestras discapacidades.
Démosles refuerzo positivo a sus buenas acciones, no los comparemos con otros niños ni con sus hermanos, démosles afecto, recordemos que cada hijo es un ser muy diferente a otro y por que alguno no piensa y actúa como esperamos tienen que alinearse al molde de los demás por ser diferentes.
Tenemos una responsabilidad AHORA , cambiemos nuestra perspectiva,
Para que ellos también lo hagan.
Como decía Erich Fromm
”Amar es una decisión,
Es un juicio
Es una promesa”
