En los 70’s el padre trabajaba y la madre era ama de casa. Era muy raro que las mujeres trabajen. Las Madres divorciadas o madres solteras, ni se diga : su condición iba contra las creencias religiosas e incluso era una vergüenza para la familia.
Actualmente el mundo de las familias ha dado un vuelco .
La Familia Millennial-
“SOMOS PADRES AL 100%”
En la familia de la Generación Millennial los padres estan muy involucrados,al igual que las mujeres en la crianza , alimentación y educación de sus hijos. Investigan mucho acerca de diferentes temas relacionados con ellos. Tienen una consciencia ecológica, lo cual hace que busquen opciones orgánicas para su alimentacion y modo de vida.
Sin embargo, hay nuevas familias cuyos roles han cambiado están:
Los Padres amos de casa-
“Estoy comprometido con el cuidado de mis hijos”.
Ya no son percibidos como ociosos o incapaces para la crianza de los hijos, decidieron quedarse en casa, ya que la esposa tiene un mayor poder adquisitivo y posibilidades de crecimiento económico.
El Padre o madre solteros –
“ Todo incluido o nada”
Padres o madres que tuvieron hijos pero nunca se casaron e inclusive, estos no fueron reconocidos por sus padres biológicos.
Normalmente por problemas económicos viven en casa de sus padres.
Para rehacer sus vidas deben escoger bien al candidato y no presentarlo a sus hijos hasta que se tenga una relación formal. En este caso es importante para los padres evitar generalizaciones negativas respecto al sexo opuesto.
Familias homoparentales:
“Algún día seremos llamados familia”
Son parejas del mismo sexo que viven juntos o contraen matrimonio e inclusive pueden adoptar niños y formar una familia. Para la nueva generación la familia va más allá de las definiciones demográficas o parentale.
Familias ensambladas.
“Los míos, los tuyos y los nuestros”
Son las familias que resultan de la unión de dos personas, una de ellas, al menos, con hijos de una unión anterior.
Aquí está mi familia , somos mis dos hijas de mi matrimonio anterior, 2 perros y mi esposo divorciado con un hijo en común.
Me separé del Papa de mis hijas, pero no de ellas.
Mi esposo a pesar de no ser el padre biológico de ellas ha sido un padre afín comprometido.
Vivimos juntos en un lugar diferente de donde vivíamos para construir una nueva familia.
Deje de trabajar por mi hijo el menor.
Economicamente el asumió todos los gastos familiares. Mis hijas lo quieren mucho, pero tienen claro que no es su padre biológico, a quien lo frecuentan a menudo.
